CAMINANDO
POR EL LADO IDIOTA DE LA LITERATURA
Pero
no es raro esto. Allá donde voy, y haga lo que haga, acabo por
sentirme
un puto payaso y que todo, alrededor, es solo un grotes-
co
circo de mierda. Casi todo acaba por parecerme, simplemente,
ridículo...
Creo que algo en mí se gripó en el pasado. No recuerdo
exactamente
cuándo ni por qué, el hecho concreto. Puede que entre
los
18 y los 20. Qué se yo... El caso es que soy incapaz de meterme
en
mi papel, en cualquier papel, y ya no tengo cuento <<vivir mi
propia
película>>.
Estoy fuera de sitio siempre, descolocado, ridículo, desu-
bicado.
Pero lo peor es que sigo intentándolo. Es algo así como una
presunción
de realidad que le doy a todo lo que veo y cualquier esce-
nificación
social. El caso es que sigo interpretando, como un imbécil
mi
papel [el que se supone que esperan de mí] cuando no tengo capa-
cidad
para meterme en aquello y vivirlo sin náuseas, sin agotamiento,
sin
sentirme un imbécil. Cualquier acto de bondad, me vuelve una
masa
de gelatina amorfa y temblorosa de agradecimiento y babas.
Cualquier
acto de maldad me tortura hasta el extremo. No encuentro
un
centro de gravedad fuera de mí mismo. Algo sobre lo que apo-
yarme,
fuera de mis nervios y mi mierda. Temo y deseo la violencia
con
una intensidad igualmente turbulenta y ansiosa. Estoy al borde
de
mí mismo, al borde de nada, al borde del asco, al borde de todo.
Soy
un completo imbécil, un gilipollas incapaz de disfrutar su propia
gilipollez.
Mi software está completamente dañado. Soy un perfecto
neurótico
de mierda, incapaz de alcanzar la puta bienaventuranza.
¿Por
qué un libro de casi 600 páginas?
¿Por
qué no descartar, pulir,
trabajarlo
más?
¿Por
qué incoherencias, faltas
ausencia
de homogeneidad
repeticiones,
plagios,chistes fáciles, etc.?
¿Por
qué?...
Porque
sí.
Porque
me sale de los cojones.
Porque
todo esto importa una mierda
y
en el fondo
a
ti también.,
Tú
no importas.
Yo
no importo,
y
mucho menos aún esta triste e inútil cosa,
este
oficio de bobos y gilipollas
ni
este libro imbécil.
A
todos nos iría mucho mejor si, en lugar de escribir,
dejásemos
de ir por ahí tocando las pelotas.
¿Cuántos
crees que leerán esto,
o
lo que tú digas o dejes de decir?
¿Por
qué entonces?...
Porque
sí.
Porque
me sale de los cojones.
Porque
puedo.
Solo
por eso.
SOY
UN TIPO CORRIENTE
No estoy loco. Soy un tipo
corriente. Si los tipos corrientes dijesen
lo que piensan, lo que realmente
piensan, este mundo no duraría
ni un segundo, se iría a tomar
por culo antes de que acabase el día.
Pero los tipos corrientes no
pueden pensar ni decir nada. Tienen
que tirar para adelante como
sea. Trabajar y pagar la hipoteca y el
colegio de los niños. Solo a
veces les entra algo de cordura y, nor-
malmente, acaban matando a
alguien. Yo no voy a matar a nadie.
Voy a escribir un libro, este
libro. Después de todo, la poesía es
inofensiva, ¿no?
CUANDO
ESTOY SOLO
Cuando estoy solo, conduciendo,
me pongo la radio muy bajo,
apenas un murmullo en lo que no
puede entenderse ni escucharse
nada con claridad. Y eso me
tranquiliza... Dicen que las abejas,
aisladas en el laboratorio, les
ocurre lo mismo, cuando sienten en
una grabación del zumbido de un enjambre.
una grabación del zumbido de un enjambre.
Ricardo
Moreno. "JESUCRISTO ESTÁ A LAS PUERTAS y cabalga un caballo
eléctrico". 2015, Lupercalia Ediciones.