No
a la transmigración en otra especie.
No
a la post vida, ni en cielo ni en infierno.
No
a que me absorba cualquier divinidad.
No
a un más allá, ni aun siendo el paraíso
reservado
a islamistas, con beldades
que
un libro garantiza siempre vírgenes.
Porque
esos son los juegos ingenuos
en
que mi agnosticismo nunca apuesta.
Mi
envite es al no ser. A lo seguro.
Rechaza
otro existir, tras consumida
mi
ración de este guiso indigerible.
Otra
vez, no. Una vez ya es demasiado.
RAMBLA
DE SANTA MÓNICA 4
La
ciudad está llena de caminos.
Todos
son buenos para escapar de ella.
No
importa adónde vaya. En cualquier lado
hay
sendas que conducen a otra parte.
El
lugar nunca importa. Es otra sitio
―otro
siempre―
el objeto de mi viaje.
CARRER
DE MAGALLANES 1
Voy
por la calle solo entre los otros.
Contemplo
a los demás desde sus ojos
y
me parece entonces que no existo.
Yo
miro sus mujeres como mira
el
pájaro la rama ya cortada:
como
algo que era mío y me quitaron.
Y
veo la alegría en otras bocas
como
un insulto personal. Sonríen.
También
yo sonreiría a mis amigos.
Pero
no tengo a nadie. Sólo mi odio.
Y
voy con mi odio, solo, por la calle.
Una
calle, otra calle...Caminando.
CARRER
DE LA VIDRIERA
Me
cuesta convivir con otra gente.
Va
armada con palabras con que hiere
a
aquel que se le acerca en busca de algo:
amistad,
compañía, amor a veces.
Y
no obstante se insiste con firmeza
que
vivir ―convivir―
es algo hermoso.
Pero
este no ha de ser el lugar, tiempo...
Ni
tampoco esta gente. No sé dónde
debe
estar. Porque existe, según dicen.
Pero
no es ahora, aquí...Me es todo extraño.
CARRER
DE VILA I VILÁ 1
Nada
tiene sentido. Estoy cansado
de
esforzarme por cosas que han perdido
interés.
Ya no ansío el obtenerlas.
No
valían la pena por lo tanto.
Y
miro a las mujeres. Esos seres
orgullosos,
egoístas y cargantes.
Y
miro a los amigos. Esos seres
presuntuosos,
mezquinos y pesados.
Miro
las flores, árboles, los bichos.
Me
son indiferentes o molestos.
Y
los montes más altos me parecen
aparatosas
muestras de lo inútil.
La
tierra es un bostezo de sí misma
deambulando
por su solar sistema
recorriendo
caminos repetidos.
Como
yo. Como todos los humanos.
José
María Fonollosa. “CIUDAD
DEL HOMBRE: BARCELONA”. 1996, DVD poesía.
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